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Guardia Civil, 172 años en defensa de la sociedad

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Hace 172 años que empezaba su andadura en la Historia de España una nueva Institución Militar que se ponía al servicio del Estado y de los ciudadanos: Era la Guardia Civil.

La Guardia Civil constituye un sistema abierto, vivo y dinámico que debe cumplir sus metas y objetivos con eficacia y eficiencia con el menor costo de recursos humanos materiales y económicos.
Al decir que la Guardia Civil es un sistema vivo abierto y dinámico se quiere llamar la atención sobre la necesidad de tratar a la organización Guardia Civil como un ser vivo, en constante evolución y adaptación al medio, lo que le obliga a no permanecer estático frente a las influencias del mundo exterior que le llevaría a la entropía, muerte orgánica y buscar por el contrario nuevos diseños, nuevos modelos, nuevas estructuras que le permitan seguir cumpliendo con eficacia sus misiones esenciales y hacer frente a los nuevos retos.

Gestación
La Guardia Civil se gestó en la primavera de 1844, cuando el reinado de Isabel II acaba de alumbrar, adelantando su mayoría de edad.
Las Fuerzas Políticas que sustentaban la monarquía comprendieron la necesidad de una Fuerza de Seguridad Pública que abarca todo el territorio peninsular y pudiese hacer frente a la preocupante situación de inseguridad generada por la delincuencia rural derivada del bandolerismo. Fueron pues estas, las razones fundamentales de la creación de la Guardia Civil a través de los Decretos del año 1844..."con el objeto de conservar el orden público, la protección a las personas y a la propiedades y el auxilio que reclame la ejecución de las leyes se crea..."

Un falso vaticinio
Vida breve vaticinaron los agoreros de turno a la nueva Institución Armada. Pero se equivocaron de lleno: He aquí el hecho incuestionable: desde el año 1844 hasta ya casi el borde del 2017 nadie como él abnegado Guardia Civil se ha quemado tanto bajo el sol de España, ni nadie ha velado tanto bajo el brillo de las estrellas, las torrenciales tormentas y las temibles heladas del crudo invierno, y siempre al servicio de todos.

Su nacimiento
Nacía la Guardia Civil con pobreza presupuestaria: Sus miembros debían costearse caballo y vestuario y en cuanto al entorno socio-político, la Autoridad y la Justicia, a partir de la quiebra social que supuso la invasión francesa, no contaba con más poder que el cacique local, el alcalde sumiso a aquél, y con un poder Judicial de brazo corto que apenas podía ser ejercido.
Nacía, pues, en un País donde apenas existían funcionarios dedicados a descubrir a los autores de los delitos y cuando estos se esclarecían faltaban medios de valentía para detenerlos.
De ese modo, el bandolerismo, la delincuencia y el caciquismo enquistados en campos y ciudades era el reto que iba a exigir la hazaña cotidiana en la lucha por erigirse en símbolo de auténtica Autoridad y Justicia por parte de la Guardia Civil.

Su fundador
Para "organizar" la nueva Institución fue elegido el Mariscal de Campo, Francisco Javier Girón y Espeleta, II Duque de Ahumada. Este militar de corte moderado pondría un gran entusiasmo y dedicación a la misión encomendada, lo que unido a su claridad de ideas sobre todo lo que debía ser la Nueva Fuerza, permitió la configuración de lo que al poco tiempo se convertiría en la Institución de Seguridad Publica más solidad y de mayor prestigio de España, convirtiéndose en un instrumento clave en la construcción del Estado moderno español.

El verdadero decreto
fundacional
Siendo Narváez Presidente del Consejo y Ministro de la Guerra se publica el 13 de mayo de 1844, un Real Decreto en el que da forma y vida a la Guardia Civil. Este decreto fue publicado en la Gaceta nº 3530.
A partir de ese momento es cuando puede aseverarse que la Guardia Civil ha quedado fundada y va a comenzar su andadura como parte integrante del Ejército aunque sus servicios habituales en tiempo de paz, sean competencia del Ministerio del Interior y Delegados del Gobierno.
El Real Decreto fundacional en su Artículo 1º dice:
La Guardia Civil depende del Ministro de la Guerra por lo concerniente a su organización personal, disciplina y haberes y del Ministerio de la Gobernación por lo relativo a su Servicio peculiar y movimientos.

Artículo 22º
Para que la primera organización del Cuerpo pueda verificarse, desde luego, se sacarán del Ejército 3205 hombres, a razón de 35 hombres de cada Regimiento de Caballería, 20 de cada Batallón de Infantería y 15 de Milicias provinciales, debiendo ser todos precisamente de la quinta de 1840 o en su defecto de la de 1841.

Los primeros guardias civiles
Tres van a ser los pilares básicos para la organización de la Guardia Civil.
Se organiza la Dirección General, situándola en la calle Torrija nº 14. Su presupuesto anual ascendía 225.176 reales, más tres raciones de paja y cebada diarias para los tres caballos asignados al Director y sus 2 ayudantes.
Se establecieron los 2 depósitos de Leganés y Vicalvaro en locales cedidos por el Ejército (En Leganés para la Infantería y Vicalvaro para la Caballería).
Estos depósitos eran visitados casi a diario por el Director General, la actividad era inusitada, y allí no se conocía la palabra "pendiente".

El Reglamento
El 9 de octubre de 1844 queda aprobado el Reglamento para el SERVICIO, SM ISABEL II cumplía 14 años de edad y se disponía solemnemente a presidir la apertura de las cortes, cinco compañías de Infantería y 2 escuadrones de Caballería, de la Guardia Civil, con un total de 693 hombres los primeros y 236 los segundos con dos Coroneles y 27 Jefes y Oficiales cubrieron la carrera de la Comitiva Real desde el Palacio de Oriente hasta las Cortes, servicio que hasta entonces había desempeñado tropas del ejército, y en esta ocasión, primera de su reinado, se le unía la Guadia Civil. Se pretendió así disipar cualquier duda para los escépticos, acerca de la naturaleza militar del nuevo cuerpo integrado en el Ejercito Activo.
El 15 de octubre, SM la Reina considerando que el periodo de Instrucción había concluido, creyó llegado el momento de "PARTIR PARA TODOS LOS PUNTOS DE ESPAÑA Y COMENZAR A PRESTAR SUS SERVICIOS".

La Cartilla
El Duque de Ahumada procedería a darle forma a la nueva fuerza, y creó una especie de Reglamento interno conocido como la CARTILLA publicada el 20 de Diciembre de 1845, consiguiendo perfilar las características que dieron a la Guardia Civil la sobriedad y eficacia de la que hizo gala hasta nuestros días y que le permitió superar los varios momentos difíciles a los que el devenir de la historia la sometió. Estas características son: disciplina, austeridad, capacidad de sacrificio, el espíritu benemérito y la lealtad al poder legalmente constituido.

Comienza a crecer
Una vez asentadas sus bases y distribuida su fuerza por todo el territorio comienza a crecer. De los 3.250 efectivos iniciales pronto paso a 9.000 (1.852, se creó la Comandancia de Baleares).
Su presencia era reclamada por todos los pueblos de España, distribuyéndose por todas las provincias con arreglo a la estructura militar y así surgieron: Los Tercios, Las Comandancias, Las Compañías, líneas y Puestos llegando a todos los rincones del País.

Profesionalización
Como fuerza permanente militar, la Guardia Civil acometió las reformas de fin de siglo y la plena "PROFESIONALIZACION" de sus plantillas, creándose la Comandancia de Canarias y acometiendo la repatriación de los Guardias Civiles procedentes de las colonias de Ultramar y Filipinas.
El 14 de Febrero de 1907 se organiza la 1ª Academia de adaptación de los Oficiales que se incorporaban a la Guardia Civil.

Guardias jóvenes
En Abril de 1853 el Duque de Ahumada crea la compañía de Guardias Jóvenes con sede en Valdemoro con objeto de proteger a los huérfanos del Cuerpo de Caídos en acto de servicio, que se convertiría en la más fértil cantera del Instituto Armado.

Perfilación de servicios
Los servicios de la Guardia Civil pueden considerarse de dos tipos: Peculiares y Extraordinarios: y a los que es justo unir los de tipo humanitario.
Entre los primeros cabria citar:
Seguridad de caminos y campos, defensa de la propiedad, conducción de presos, prófugos, desertores, uso de armas, caza, trafico... etc.
Entre los segundos cabe citar los de Campaña desempeñados de lado del Ejercito y los realizados como fuerza antidisturbios; de ambos, señalar que, a lo largo de los ciento setenta y dos años de existencia no hubo conflicto armado o insurrección donde no hubiese intervenido la Guardia Civil, tanto en las guerras Carlistas, insurrecciones republicanas, guerra de Marruecos..., los hombres de la Benemérita estuvieron presentes como una fuerza más del Ejercito, especialmente por la veteranía y disciplina de sus hombres.

Servicios humanitarios
Pero no debemos olvidar un campo tan genuino como son los Servicios humanitarios, que fueron impregnados en la Reglamentos del Cuerpo, y que abarcó horas y horas del que hacer de los hombres de la Guardia Civil.
A principios del siglo XX, la Guardia Civil contaba con una plantilla de cerca de 20.000 hombres distribuidos en más de 2.000 puestos.

Gran Cruz de Beneficiencia
Por Decreto de 4 de Octubre de 1.929, se concede al Instituto Armado de la Guardia Civil la Gran Cruz de Beneficencia en reconocimiento a su labor humanitaria en pro de la sociedad la Institución pasaba a Benemérita no solo por denominación espontanea del Pueblo, sino por mandato legal.

Lucha contra el terrorismo
La herramienta básica de la que se sirven los estados democráticos para la lucha contra el terrorismo es la enorme fuerza moral que dimana de la legalidad y la utilización de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, como brazo ejecutor de esa legalidad.
La principal misión de la Guardia Civil en la sociedad actual es garantizar el libre ejercicio de los derechos y libertades enunciadas en la Constitución.
La eficacia de la Guardia Civil en la lucha y erradicación de este tipo de delincuencia quedó demostrada en su ya larga historia con independencia del régimen político imperante.
La erradicación del bandolerismo decimonónico, a finales del siglo XIX, que asolaba parte del territorio peninsular. A comienzos de siglo XX, la amenaza del terrorismo de signo anarquista, de nuevo se convierte en baluarte del Estado para luchar contra el mismo. En la década de los 30, la revolución obrera de 1.934 con la aniquilación de la Compañía de Sama (111 muertos tuvo la Guardia Civil) En los años 40 vuelve a ser protagonista de la lucha contra "EL MAQUI", que costo 263 muertos a la Guardia Civil, consiguiendo a finales de los 50 su erradicación, y a finales de los 60 la violenta irrupción del terrorismo de ETA, junto a los de signo revolucionario, se cebaron de forma implacable con la Guardia Civil. Un total de 243 hombres de la Benemérita han sido asesinados a manos de la barbarie terrorista.
La Guardia Civil continúa con su lucha callada, constante y sacrificada contra el terrorismo, que constituye un esfuerzo, una pugna en salvar vidas humanas, y sus hombres saben que en el cumplimiento de su misión deben estar dispuestos a darlo todo, cumpliendo el lema de sus Casas Cuarteles. Todo por la Patria.

Referéndum de El Sarre
Con motivo del enrevesado problema de territorialidad de El Sarre (enero 1.934) entre Alemania y Francia. Europa (sociedad de Naciones) eligió a una compañía de la Guardia Civil para garantizar el orden durante los comicios.
Esta compañía fue la precursora de los Cascos Azules Españoles de la ONU cincuenta años antes. Con este motivo decía un diario Alemán:
"Hoy por hoy la única gendarmería que existe en el Mundo con una ejecutoria limpia, austera, digna, ejemplar y humanitaria, es la Guardia Civil Española" Por esto fue elegida.
Actualmente la Institución colabora con los procesos de paz en el Mundo. A través de las Fuerzas de la ONU destacadas en diversas zonas donde la conflictividad azota a la población civil, la Guardia se ha desplazado al Salvador, Antigua Yugoslavia, Mozambique, Nicaragua, Mali etc. y con ello contribuye a aumentar el prestigio de España y del Cuerpo.

Modernización
Finalizada la dura etapa que supuso la amalgama con el Cuerpo de Carabineros y otras dificultadas internas, la Guardia Civil pudo iniciar una etapa diferente, caracterizada por un esfuerzo modernizador, como respuesta a las necesidades y demandas a sociedad española en progreso:
Y así en 1.959, se constituye la Agrupación de tráfico, dando paso a otras especialidades: Policía Judicial, Grupo Especial Intervenciones en Montaña, desactivadores de explosivos, Agrupación de Helicópteros, Unidad Especial de Intervención, Servicio Protección de la Naturaleza, La Agrupación Rural de Seguridad, Servicio de Psicología, Servicio Fiscal, Servicio Sinológico (Perros), Grupo Especial de Acciones Subacuáticas, Protección a la Naturaleza y por último el flamante Servicio Marítimo y Agrupación de Helicópteros.
Dependencia orgánica
El Cuerpo de la Guardia Civil tiene la naturaleza de Instituto Armado de naturaleza Militar, teniendo una doble dependencia de los Ministerios de Interior y Defensa.
Para las órdenes de tipo Gubernativo, tiene dependencia directa con los Delegados del Gobierno a través del Jefe de la Unidad.
También existen otras dependencias Funcionales: De los jueces en las misiones Judiciales y de los Administradores de Aduanas dentro del Recinto Aduanero.

Tradicional eficacia
La culminación del citado esfuerzo modernizador, dirigido a mantener la tradicional eficacia y la equiparación de los Cuerpos Policiales de elite Europeos e iluminar el camino del próximo Siglo al Servicio de TODOS haciéndolo eficaz y honradamente.

Defender la vida
El rótulo Guardia Civil "en defensa de la vida" no queremos situarlo como sustituido de Todo por la Patria que estaba sobre la puerta del viejo cuartel que recuerdo de mi infancia, niño veraneante en un pequeño pueblo de Toledo. Porque defender la vida viene a ser lo mismo que el lema emblemático tradicional, pues bien porque creo que la Guardia Civil en defensa d la vida es algo más que un título amable. Hay que partir del supuesto de que la vida esta manejada, tanto desde el interior del propio organismo humano como desde el entorno que le rodea. Y lo mismo cabe decir de la vida de la sociedad, por los peligros que le acechan del exterior y por los elementos desintegradores que actúan en su seno.
La Constitución Española de 1978 establece en el apartado 1 del artículo 104 que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad bajo la dependencia del Gobierno, tendrán como misión defender el libre ejercicio de los derechos y libertades y garantizar la seguridad ciudadana. Entre estos derechos, nuestra Carta Magna reconoce el derecho a la vida, pero este más que Nuestro Tribunal Constitucional en sentencia 53/85, la denomina derecho, valor superior y central del ordenamiento, valor jurídico fundamental, lógico y ontológico para la existencia de los demás derechos. Está dotado de la máxima protección constitucional mientras el resto de los derechos no son absolutos sino que su ejercicio tiene límites y admite grados, no puede decirse lo mismo de la vida.
Por todo ello, la lucha callada, constante y sacrificada de la Guardia Civil constituye un esfuerzo, una pugna, en salvar vidas humanas. Y con independencia de las vidas humanas que se han salvado en tantos años de servicio, no podemos olvidar a los 243 Guardias Civiles asesinados por el terrorismo.
La Guardia Civil está dispuesta a llevar hasta sus últimas consecuencias el lema que figura en la puerta de sus Casas Cuarteles: TODO POR LA PATRIA. Y darlo todo, en ocasiones es dar la vida, otras, interminables horas de duro servicio y, en otras no tener la comprensión de la sociedad en su delicada y compleja misión.

Misiones de paz
La Guardia Civil toma parte en las misiones de paz organizadas por las Naciones Unidad. Es necesario poner de relieve que las Operaciones de Proyección Exterior de la Guardia Civil en defensa de la paz y de los derechos humanos merecen la pena política, policial y militarmente, porque las misiones de paz son un valioso dividendo de la paz, del cual todos los ciudadanos del mundo nos beneficiamos y del que también la Guardia Civil tiene derecho a participar. Que sus enormes posibilidades le deben asegurar en estas misiones "un puesto de trabajo por la paz", en el entendimiento de que una actitud contemplativa podría malograr sus brillantes expectativas y es necesario realizar un esfuerzo orgánico de adaptación para hacer frente con éxito, como lo hacen, al nuevo "reto por la paz".

La Guardia Civil actual
Desde el punto de vista de la teoría orgánica la Guardia Civil constituye un sistema abierto, vivo, dinámico que cumple con sus metas y objetivo con eficacia, estos, con el menor costo posible en recursos humanos, materiales y económicos. Al decir que la Guardia Civil es un sistema se quiere significar que los elementos que la componen no actúan aisladamente, sino que están interrelacionados e interconectados de tal forma que el resultado global de sus esfuerzos es muy superior a la simple suma matemática de sus componentes.

Guardia Civil en Ceuta
Corría el año 1898, el Ministro de la Guerra decide aumentar la plantilla de la Guardia Civil en 3400 hombres, que habían sido consignados en los nuevos presupuestos de la nación, alcanzando la plantilla un total de 18.970 hombres, Ceuta venía demandando, desde hacía tiempo, la presencia de una unidad fija de la Guardia Civil.
Aprovechando este aumento de plantilla el Ministerio de la Gobernación dispone la creación de la primera unidad de la Guardia Civil en la Plaza de Ceuta, y el primero de julio de este año (1898) se publica la Real Orden Circular del Ministerio de la Guerra, creando una unidad tipo Sección que dependería de la Comandancia de la Guardia Civil de Cádiz. Posteriormente el 23 de abril de 1900 se aprueba la nueva composición de la plantilla de la Guardia Civil en Ceuta, será una compañía.
Estos son los comienzos ya centenarios de la presencia de la Guardia Civil en la bella y españolísima ciudad Autónoma de Ceuta. Un siglo después la Guardia Civil sigue estando y velando, día y noche, por Ceuta logrando granjearse un importante prestigio y arraigo social entre las caballas, cumpliendo su misión con ejemplaridad y trabajo permanente día y noche.
La Comandancia desempeña su misión en su cuadricula geográfica de 19 km2 y con una situación estratégica e envidiable en la calle mayor del mundo, que es el Estrecho de Gibraltar que le separa de la península y con frontera terrestre con el vecino Reino de Marruecos. En esta peculiar situación de Ceuta, tiene un especial protagonismo la Comandancia de la Guardia Civil que cumple con eficacia sus diversas misiones, protección de la frontera, custodia de costas, lucha contra el narcotráfico, defensa del ciudadano, su prestación de auxilio y atención a las víctimas, dando una respuesta ágil y enérgica en todas las misiones a cumplir. Ante la situación actual, se ha visto obligada a duplicar prácticamente sus efectivos a 600 hombres en menos de 2 años y aumentar considerablemente su parque de vehículos en los distintos modelos, y es una Comandancia donde el rendimiento de la Guardia Civil salta a la vista. Es una Unidad de profesionales dispuestos a salvar cualquier obstáculo por cumplir sus diversas misiones haciéndolo con eficacia y competencia.
La Guardia Civil ha de ir acorde siempre con la tradición, con la modernidad y la diferencia solo radica en el ajuste a la legalidad vigente en cada momento.
Pero nunca debemos olvidar que detrás de esos medios tecnológicos de última generación que hoy utiliza la Guardia Civil están los hombres y mujeres que visten su honroso uniforme y podemos recordar que en la cartilla o mejor decir el reglamento de la Guardia Civil no es anacrónico y se puede considerar actual y esto exige su cumplimiento y que mantiene viva la moral de la Guardia Civil.
Actualmente y desde hace dos años la Jefatura de la Comandancia de Ceuta la ejerce un Coronel y siendo el Segundo Jefe el Comandante D. Jose Maria Jimenez Gutierrez que es un elevado exponente del Instituto Armado en la Comandancia de Ceuta con la satisfacción del deber cumplido sin prescindir de la Autoridad y la tradición del Cuerpo y ha ido dejando su huella en su trabajo, y el Comandante D. Miguel Ángel González Reina, que es el responsable de la Jefatura de Personal y Apoyo de la Comandancia, haciéndolo con eficacia y competencia.
El Coronel D. José Luis Gomez Salinero Jefe de la Comandancia es un Oficial de gran prestigio y amplia vocación y experiencia donde sus cualidades profesionales y morales han prevalecido sobre los intereses particulares y combinando acertadamente, trabajo, estudio y experiencia, y tiene en su despecho de trabajo un ejemplar (editado por la Dirección General) de ese catecismo de ética y moderador del comportamiento que es la CARTILLA que al mejor decir es el reglamento de la Guardia Civil, que no es anacrónico y se puede considerar actual y que mantiene viva la moral.
El Coronel Gomez Salinero, con su gran sentido del honor y caballerosidad y su lealtad y compañerismo han ido dejando su huella en su hoja de servicio con un profundo ADN castrense.
Que nuestro corazón exprese una oración y un emocionado recuerdo a los que ya se fueron.
Muchas felicidades a todos.

A todos los guardias civiles españoles, a todos

Porque todos ellos escribieron, con su sudor, con su sacrificio, con su sangre la Gloriosa Historia de nuestra querida Guardia Civil en sus 172 Años de existencia.
A los Laureados y Medallas Militares.
A los silenciosos titanes de la Paz y tranquilidad diaria.
A los que llegaron.
A los que cayeron en los caminos polvorientos de La Piel de Toro.
A los que se abrasaron al sol.
A sus viudas y huérfanos víctimas de la incongruencia y la irracionalidad.
A los que regaron con su sangre la tierra Patria y el asfalto por cumplir con su Deber.
A los Defensores de la Vida.
A los Héroes anónimos.
A los que conviven en las Casas-Cuarteles en los más recónditos lugares.
A los que surcan los mares territoriales, nuestros ángeles de la guarda.
A los que, en pájaros de hierro, recorren nuestro cielo azul para salvar vidas.
A los que en cumplimiento de su misión lo hicieron hasta las últimas consecuencias.
A los que en interminables horas de duro servicio regresan a sus Casas-Cuarteles donde figura el lema: ¡Todo por la Patria!.
A la pareja de verde uniforme y gorro acharolado que llevaban la tranquilidad a los caseríos y caminos.
A la disciplina, al sacrificio, a la lealtad, y al compañerismos que une entrañablemente a estos hombres al servicio de todos.


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