"Votar a CIUDADANOS es propiciar un GOBIERNO RADICAL", declaraba el candidato del Partido Popular al Congreso en nuestra Ciudad. Las tonterías que uno tiene que decir y oír en campaña. El que lo hagan al dictado no lo mejora. En el fondo, todos comprendemos que, para él, lo que no sea votar al Partido Popular es antisistema, voto inútil y extremismo.
No perderé tiempo. C's ha dado prueba continuada de sentido común, exigencia, espíritu cooperador y defensa del interés general. Y lo hace en todas las esquinas de España y con todas las fuerzas políticas. Porque con todas habla pero, eso sí, sin perder su identidad. Es un partido que tiene las ideas tan claras como las dice. Y, de momento –que muchos lo cuestionaban-, sin sillones. Esa es la libertad de C's a la hora de conseguir consensos.
El Partido Popular PIDE QUE NO SE VOTE a CIUDADANOS para fortalecerse de cara a Podemos. Lo hacen, como siempre, mintiendo, porque todos sabemos que de estas elecciones NO va a salir un Gobierno. Ninguno de los grupos parlamentarios lo logrará por sí mismo. Serán sus capacidades negociadoras las que permitirán conseguir un Gobierno para nuestro país. Y en esto Ciudadanos da una lección a los demás: la contraria que nos ha dado hasta ahora el PP. Ciudadanos pone condiciones a unos y otros, las mismas: la primera, la lucha contra la corrupción y todos sus mecanismos.
Los que tengan esta duda que piensen a quien es más interesante votar.
Porque, además, en un círculo chocante, Partido Popular y Podemos se alimentan mutuamente. En esta campaña, los dos, a la vez que denigran,
potencian al otro partido en su propio beneficio. Lastimosa estrategia para los que, desde el centro, nos sentimos ninguneados.
Pero no es sólo estrategia electoral. La corrupción que el PP, sus políticas antisociales y el enquistamiento de problemas que no han sido capaces de resolver –volvamos la mirada hacia nuestra ciudad- son terreno abonado para Podemos. Los antiguos feudos del PP (pensemos en Valencia, Mallorca...) lo son ahora de Podemos porque sus gobiernos y mayorías continuadas han dejado a su gente harta de políticos y de esas políticas. Y esta regla también se cumple por barrios.
Sean Uds. también rebeldes: vayan a votar. Y no voten ni lo que les dicen ni lo que se espera.