El próximo año 2017 ha sido declarado Año Internacional del Turismo Sostenible para el Desarrollo.
A tal efecto, la Organización Mundial del Turismo (OMT) va a celebrar una serie de reuniones en Málaga, en las que, además de diseñar el plan de trabajo para dicho acontecimiento, también se pretende avanzar en la Agenda 2030 de las Naciones Unidas (ONU), en su vínculo del turismo a los Objetivos de Desarrollo Sostenibles aprobados recientemente. Dicha reunión es especialmente relevante, por varios motivos. En primer lugar, porque los objetivos que se marcan en la Agenda 2030 son de vital importancia en estos momentos para el futuro del planeta y de la propia humanidad. En segundo lugar, porque el sector del turismo, por su impacto en la economía, es clave para el desarrollo sostenible en el mundo. Empecemos por el segundo aspecto.
La importancia del sector del turismo en el mundo viene avalada por las espectaculares cifras de desarrollo que le acompañan. Justo en estos días la OMT nos informaba de que las exportaciones por turismo internacional habían crecido en 2015 un 4% en todo el mundo. Y también daba otros datos. Los ingresos por turismo internacional de los destinos crecieron un 3,6%, en sintonía con el incremento del 4,4% en llegadas internacionales. Además, por cuarto año consecutivo, el turismo internacional creció a un ritmo superior al del comercio mundial de mercancías, aumentando su porcentaje sobre el total de exportaciones mundiales hasta el 7% en 2015, siendo su valor total de 1,4 billones de dólares.
Para no abrumar con cifras, basten dos datos más. Según afirmó el Secretario General de la OMT, Taleb Rifai, al dirigirse a la 60ª reunión de la Comisión Regional para las Américas en la Habana (Cuba): “A pesar de la lentitud y debilidad de la recuperación económica, el gasto en turismo internacional creció significativamente en 2015, pudiéndose afirmar que el turismo es hoy una categoría importante del comercio internacional de servicios”. Los Estados Unidos, China, España y Francia, siguen siendo los principales destinos turísticos en el mundo, siendo China, Estados Unidos y Reino Unido los lideres en turismo emisor.
Respecto a la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de la ONU, su importancia radica en que su marco va mucho más allá de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, pues además de mantener algunas prioridades del mismo, como la erradicación de la pobreza, la salud, la educación y la seguridad alimentaria y la nutrición, establece otros de amplia gama de objetivos económicos, sociales y ambientales, y se definen los medios de implementación, lo cual es realmente atractivo.
Dentro de sus 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible y169 metas conexas, es destacable el Objetivo 17. Fortalecer los medios de implementación y revitalizar la Alianza Mundial para el Desarrollo sostenible. En el mismo se habla de finanzas (fortalecer la movilización de recursos internos, mediante la prestación de apoyo internacional a los países en desarrollo, movilizar recursos financieros adicionales de múltiples fuentes, ayudar a los países en desarrollo a lograr la sostenibilidad de la deuda a largo plazo o aplicar un sistema de promoción de inversiones); tecnología (cooperación regional e internacional en ciencia, tecnología e innovación, promoción de tecnologías ecológicamente racionales, creación de un banco de tecnología y mecanismos de apoyo a la creación de capacidad en materia de ciencia, tecnología e innovación para los países menos adelantados); creación de capacidad; comercio; cuestiones sistémicas (coherencia de la normativa nacional e internacional).
Pero también resulta especialmente relevante el Objetivo 13. Adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos, en el que pone en coordinación esta Agenda 2030 con la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, que recientemente aprobó en París un importante acuerdo y compromiso de casi 189 países en el mundo, para limitar sus emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera hasta intentar que el planeta no incremente su temperatura media más allá de 2 grados centígrados anteriores a la época de la industrialización. En esta Cumbre del Clima se reconoce que el cambio climático representa una tarea urgente e irreversible de las sociedades humanas y el planeta, y pone los medios económicos y financieros adecuados en marcha para que se pueda realizar una transición justa por parte de los países más vulnerables hacia un mundo más sostenible.
En estas circunstancias, el turismo se ha convertido en un sector económico estratégico para el desarrollo sostenible y para la generación de riqueza y progreso en las sociedades. Pensar que esto también le afecta a Ceuta, es algo de sentido común. Por ello, ponerse a trabajar juntos para convertir a esta ciudad en un destino turístico es vital para el futuro. Formar a los profesionales que lo puedan gestionar, mucho más. Si lo empezamos a hacer ahora, esta ciudad podrá tener un horizonte claro. Pero si seguimos lamentándonos y culpando a unos y a otros de nuestra situación, cuando llegue el momento de demostrar que estamos preparados, quizás sea demasiado tarde. Es la diferencia entre tener o no tener una visión estratégica a largo plazo.