Cuatro años para estar orgullosos de ser españoles

En la pasada legislatura las Cortes Generales hemos aprobado más de ciento sesenta leyes que han servido para mejorar y actualizar todos los campos de la acción política,  no sólo para sacar a España del pozo en que nos dejaron las nefastas políticas económicas de la izquierda, que también, sino mejorar las relaciones laborales, la sanidad, la acción exterior del gobierno, la lucha contra el fraude y la corrupción, la agricultura, el comercio interior y exterior, la educación .... leyes que han servido para poner a España, nuestra patria común, en el camino adecuado de progreso, aceptación y respeto, no sólo en Europa, sino en el mundo entero.
De la solvencia, sensatez y responsabilidad de las reformas llevadas a cabo por el gobierno de Mariano Rajoy, dan fe las intervenciones en el Plenario del Congreso de líderes de la talla de Durao Barroso, Juncker, Van Rompuy, Berlusconi, Nicolás Sarkozy y Ángela Merkel, que han apoyado y aplaudido la política llevada a cabo por el Partido Popular español.
Esta ingente labor legislativa se ha llevado a cabo sin la ayuda, más bien lo contrario, del principal partido de la oposición, que sigue teniendo como único objetivo: aislar al Partido Popular, emulando aquel nefasto Pacto del Tinell, no importándole para conseguirlo unirse o votar con partidos independistas y contrarios a la Constitución Española, llevándoles en muchos casos al gobierno de Comunidades Autónomas o alcaldías de grandes y pequeñas ciudades.
Hoy podemos decir orgullosos que la prima de riesgo es tan baja que nos financiamos a coste cero, por ejemplo, esta semana el Estado Español ha conseguido que nos prestan dinero sin interés, en préstamos de hasta nueve meses. Con Rodríguez Zapatero todos recordamos como estábamos. Pese a lo que diga el Comisario Europeo socialista de Economía, y que ahora el PSOE utiliza para decir que nos desviaremos dos décimas, España cumplirá con el déficit previsto y no se desviará dos décimas. ¿No se acuerda ya el señor Pedro Sánchez (Zapatero 2.0), cuando ellos nos ocultaron un déficit de 30.000 millones de euros (9 puntos de desviación)?
Debemos estar orgullosos y "sacar pecho" todos los españoles por lo conseguido en materia económica y lucha contra el paro. (En el último año, la ocupación ha aumentado en 544.700 personas, su mayor repunte desde el tercer trimestre de 2007, por lo que este año se conseguirán  crear 600.000 empleos más).
Pero de todas las leyes aprobadas, me voy a centrar sólo en una, aquella de la que me siento más orgulloso, me refiero a la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa, LOMCE. Podía hablar páginas enteras sobre ella (lo he hecho), porque si en algo estoy de acuerdo con la izquierda y los nacionalistas es que cualquier cambio en la sociedad debe hacerse desde la educación. La escuela es el mejor medio de comunicación y formación que existe y también, por lo tanto, de deformación y propaganda partidista, que es lo que se ha hecho en Cataluña con los símbolos y todo cuanto signifique España durante más de 30 años.
La LOMCE ha puesto en valor el esfuerzo, la preparación, la necesidad de evaluación para saber qué hacemos y cómo lo hacemos; pero sobre todo esta Ley ha sido atacada y es odiada por separatistas e izquierdistas por dos motivos:
a) Homogeniza los contenidos de la enseñanza evitando que un alumno estudie no sólo enfoques distintos de un tema, sino que lo estudie o no. Evita el provincianismo. (Algunos enseñan que a cien km de la localidad de alumno existe un rio llamado Besos, pero no existe el Ebro hasta que llega a Tarragona. El Duero o el Tajo desconocidos.) Y permite, que no impone, que un alumno pueda aprender y hablar en su centro en castellano si esa es su lengua vehicular.
b) Refuerza el contenido del artículo 27.3 de nuestra Carta Magna: "Los poderes públicos garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones.". La LOMCE deja claro que somos los padres y madres los que tenemos que decidir que educación queremos para nuestros hijos y pupilos. España es un Estado aconfesional,  algo muy distinto a laico señores socialistas y "podemitas". En vez de perseguir la formación religiosa, eviten que en los institutos de Sevilla se sigan repartiendo preservativos y lubricantes vaginales y anales sin permiso de padres o tutores, y no olviden nunca que la Europa y España que hoy todos alabamos como santuario de libertad, igualdad y democracia,  son el fruto del  humanismo cristiano. Si algún día olvidamos nuestros orígenes, tendremos que volver a vivir la historia pasada. Estaremos engañándonos y obligando a nuestros hijos a tener que repetir todos los pasos, que han durado siglos, para gozar del status que hoy significa ser europeo. Sólo los regímenes totalitarios atacan la libertad educativa y religiosa.
Empecé hablando de la importancia de determinados hechos relevantes en nuestros cuatro años de legislatura, entre todos quiero destacar: el cambio en la Jefatura del Estado realizado con absoluta normalidad, lo cual dice mucho de nuestro Rey Felipe VI y de la aceptación por el pueblo español de la monarquía parlamentaria, y la labor de unas Cortes Generales que junto al Gobierno han estado trabajando cumpliendo su misión hasta el último día.
Termino resaltando la noticia del pasado día 16, buena para todos los españoles y muy especialmente para los ceutíes y para este senador: el archivo de las actuaciones contra varios guardias civiles por los tristes sucesos acaecidos el 6 de febrero en las aguas fronterizas en el Tarajal. Mi alegría porque se ha hecho justicia a esos guardias civiles, a su familia y a todo el benemérito Cuerpo de la Guardia Civil. Gracias por la abnegada e impagable labor que día a día lleváis a cabo, y nos permiten a todos los españoles sentirnos seguros y confiados