La comisión de investigación acerca del escándalo con el que ha comenzado la legislatura el desgobierno de Vivas al fin parece que va a arrancar. Casi tres meses después, será cuando se ponga en marcha.
La finalidad debe ser la de esclarecer lo ocurrido y, tal y como lo entendemos nosotros desde el MDyC, la de depurar responsabilidades políticas entre quienes estén relacionados en este asunto. En cuestiones así, no caben ni aceptaremos medias tintas.
No deja de resultar llamativo que después de tanto tiempo sin siquiera proceder a la constitución de la comisión, esta coincida con el día marcado en el calendario para que se produzcan dos importantes declaraciones judiciales: la del ex gerente de la empresa municipal de la vivienda y la del consejero de fomento. ¿Casualidad o causalidad?
La participación de miembros del Partido Popular, que a la vez son miembros del consejo de gobierno, no servirá para que el desgobierno a nuestros ojos, ni a los de la ciudadanía, se exima de responsabilidad.
La responsabilidad es del desgobierno de manera conjunta, y especialmente de quien los dirige y confía o desconfía en determinadas personas para llevar un área concreta.
Esperemos que en esta comisión la transparencia deje de ser algo más que una palabra socorrida por parte del PP para rellenar discursos y se ejerza realmente. Si no hay transparencia será imposible acceder a la información, y si no podemos acceder a la información poca luz se podrá aportar al asunto. De momento, el consejero de fomento actual ha arrancado con mentiras como es la de negarme que hubiera fijado día, hora y lugar para la celebración del sorteo y a los dos días, aparecer en un medio todo lo contrario: un documento con día, hora y lugar firmado por la gerente actual.
Si el Sr. Vivas tiene entre personas de su confianza a algunas con tanta desfachatez para faltar a la verdad y encima permitirles seguir teniendo puestos de responsabilidad, habrá que esperarse cualquier cosa.
Capítulo aparte de la transparencia merece el de la utilidad, y es que de esta comisión de investigación para aclarar lo ocurrido en la adjudicación de las 317 VPO de Loma Colmenar deberían desprenderse consecuencias políticas traducidas en que se asuman responsabilidades por parte del Sr. Vivas y los suyos (y por cualquiera que esté implicado en cuestiones turbias relacionadas con la adjudicación de viviendas de protección oficial)
Ahora bien, ¿interesa realmente al desgobierno una comisión transparente y útil? ¿Aceptará y actuará de manera contundente aunque sea contra algunos de los suyos?
Es difícil creerlo, por no decir imposible, aunque desde el MDyC intentaremos arrojar luces y taquígrafos sobre todo este asunto para aclarar todo lo ocurrido, sin perjuicio de las acciones penales que se lleven a cabo en el juzgado.
Y es que, viendo como viene actuando el desgobierno, las dificultades para acceder a la información que le venimos solicitando (todavía estamos a la espera de que nos den copia de esos contratos de alquiler de las 317 que el Sr. Vivas tiene en su caja fuerte y de las actuaciones judiciales), escuchando lo que se dice en la calle y recordando a Napoleón (que decía que “si quieres que un problema perdure, nombra una comisión”) esperemos que esto no sea más que una pantomima por parte del PP y de quienes les bailan el agua.
El tiempo nos lo dirá.